En verano la alimentación de los niños es fundamental para mantener en ellos unos buenos niveles de energía y vitalidad. Pensemos que los pequeños de la casa tienen mucho más tiempo libre en esta época del año, por eso es frecuente que jueguen más y practiquen más deporte.
Además, con una adecuada alimentación se consigue luchar contra los efectos negativos que las altas temperaturas pueden tener sobre su organismo. Nutrirles adecuadamente para evitar que sufran golpes de calor o episodios de deshidratación es otro punto importante durante el verano.
Por si esto fuera poco, ofrecer a los niños comidas nutritivas y aperitivos saludables en verano contribuirá a que desarrollen buenos hábitos alimenticios. Y es que las vacaciones de verano son una oportunidad única para inculcarles estos valores. En esos momentos, los padres suelen tener más tiempo disponible para involucrarse en la alimentación infantil y pasar más ratos con ellos en torno a la mesa o en la propia cocina. Pide a tus hijos que den su opinión respecto al menú de la semana, haz que te acompañen a comprar al mercado o al súper y deja que te ayuden en la preparación de los platos que vayas a cocinar. ¡Lo pasarán en grande y aprenderán el valor de la comida saludable!
¿Qué nutrientes son indispensables en verano?
En líneas generales, los nutrientes que los niños necesitan en verano son los mismos que en invierno, pero hay una diferencia: el frecuente descontrol que se suele producir en las comidas por estar fuera de casa o de vacaciones. A continuación, te recordamos qué nutrientes no deben faltar en el menú de los niños, estén donde estén:
- Vitaminas y minerales: los alimentos que más cantidad de estos nutrientes tienen son, sin duda, las verduras y las frutas. ¿Lo mejor? Que en verano apetecen siempre un montón.
- Proteínas: son imprescindibles para el desarrollo de sus músculos y las encontramos en la carne, el pescado, los huevos y las legumbres.
- Calcio: tus hijos se encuentran en pleno periodo de crecimiento, por lo que este nutriente es esencial para ellos. No dejes de darle a diario lácteos como el queso, la leche o el yogur.
- Fibra: le proporcionará la energía que necesita para vivir al máximo y la puedes aprovechar de cualquier cereal integral, como el arroz o la avena.
- Grasas saludables: son fundamentales para el correcto desarrollo del cerebro de los niños y en su versión saludable están, por ejemplo, en el aceite de oliva, las nueces, las semillas o los aguacates.
6 ideas de aperitivos saludables para los más pequeños
¿Te faltan ideas para preparar platos saludables en verano? Ya te hemos dado anteriormente algunas pistas para que vuestras cenas veraniegas sean ricas en nutrientes, y ahora vamos a contarte algunos ejemplos de snacks saludables, para que sus meriendas se adecuen también a sus necesidades específicas:
1. Frutos secos
Nueces, almendras, avellanas, pasas… Mezcla en un bol un puñado de frutos secos variados y dáselos a tu pequeño a media mañana o a media tarde. ¡Verás qué bien le sientan! Están llenos de grasas saludables, proporcionan mucha energía y son la alternativa perfecta a los típicos snacks salados y envasados que encontramos en las tiendas.
2. Frutas
Otro de los aperitivos saludables para verano que no te costará nada preparar: solo tienes que preguntarle qué fruta le apetece merendar y dársela. ¡Más fácil imposible! Si tu hijo es pequeño, no hay problema: hay muchas frutas que son más fáciles de comer que otras. Algunos ejemplos son el plátano o la mandarina. En cualquier caso, acertarás seguro.
3. Rollitos saludables de jamón y queso
Y decimos que son saludables porque en lugar de pan o tortitas llevan ¡zanahoria! Sí, has oído bien, estos rollitos de jamón y queso se preparan enrollando unas cuantas lonchas de estos ingredientes sobre la base de un palito de zanahoria. Para que no se desmonten, te aconsejamos asegurar los rollitos con un palillo. Así, tendrás una excelente fuente de proteínas, vitaminas y calcio. Y la combinación de sabores le encantará, te lo aseguramos.
4. Palitos de verdura y hummus
Otra combinación súper original con todo lo que necesitan nutricionalmente hablando consiste en cortar en forma de palitos las verduras que tu elijas (por ejemplo, zanahoria, pimiento o pepino) y ofrecerlas junto a un hummus casero o uno del súper que sepas que es saludable. Esto último, el hummus, le aportará fibra y proteínas, mientras que las verduras se encargarán de proporcionarle vitaminas y minerales.
5. Bolitas de energía
Son bolitas energéticas porque contienen elementos que despertarán todos sus sentidos. Te proponemos crear tu propia versión combinando estos ingredientes, pero hay muchas otras posibilidades:
- Avena.
- Semillas de chía.
- Pasas.
- Dátiles
Mezcla todo en un bol y añade un chorrito de miel. Con las manos, ve creando bolitas pequeñas y mételas en la nevera para que la mezcla se solidifique. El resultado será un delicioso snack rico en fibra, grasas saludables y proteínas.
6. Palomitas de maíz caseras
¿Crees que es difícil preparar palomitas en casa? ¡Para nada! Solo necesitas granitos de maíz, una olla, una pizca de sal y un chorrito de aceite de oliva. Tienen mucha fibra y son perfectas para una merienda en casa, con o sin peli de por medio. Aparte, son mucho mejores que las que se venden en paquetes, que suelen contener grasas perjudiciales y todo tipo de aditivos.
Un consejo adicional: a la hora de planificar cualquiera de estas opciones de aperitivos saludables para el verano, ten muy en cuenta la presentación. Que sea colorida y atractiva contribuirá a que los niños tengan más ganas de probar las meriendas que prepares. Y recuerda también la importancia de una buena hidratación: el hecho de que junto a estos snacks beban varios vasos de agua logrará que su hidratación se mantenga en un buen nivel. En este sentido, te aconsejamos huir de los refrescos y zumos industriales, que son fuentes de azúcar muy poco saludables para los niños (y también para los adultos).